La grave crisis que vive el Ballet folclórico nacional.
Malas condiciones laborales, sueldos impagos y amedrentamientos han llevado a un grupo del Bafona a declararse en huelga de hambre.
Una dura batalla están dando hace mas de un año los artistas del Ballet folclórico nacional por sus derechos laborales y humanos.
Una de las primeras denuncias se debió a las malas condiciones en las que los trabajadores se desenvolvían, un espacio muy pequeño ubicado en el ministerio de educación que contaba con evidentes problemas de insalubridad.
La organización relata que "el 1 de diciembre de 2023, finalmente se les asignó una nueva sede después de meses sin poder retomar sus labores, debido al cierre de la sede anterior por las razones antes descritas. Aunque indican que "la actual aún no cumple con todas las condiciones necesarias para albergar al Bafona, esto se considera un mal menor ya que, desde su regreso han enfrentado represalias en forma de castigos coercitivos, como hostigamiento y segregación.
El maltrato permanente del Ministerio de las Culturas ha dejado a 18 trabajadores del Bafona en una situación desgarradora. Varios tuvieron que presentar licencias psiquiátricas debido a síntomas depresivos.
Lo que mas afecta en este momento a estos trabajadores del Bafona es el no pago de sus sueldos desde hace tres meses, situación que los ha llevado a tomar medias extremas como declararse en huelga de hambre.
se señala que los 18 artistas afectados que tienen más de 25 años de trayectoria "están sufriendo segregación instruida por la autoridad y cada acción hiriente y gesto de indiferencia, aporta al maltrato que ha dejado su huella en la "Desvalorización que cada uno de ellos siente". Asimismo la agrupación detalla que con respecto a sus labores, "hoy no se les permite entrar a sus salas de ensayo, ni participar de la escena.
Frente a esta situación, Maximiliano Lobos, el abogado representante de los artistas afectados, no descarta además querellarse en contra de quienes hayan cruzado la línea, ya que según argumentó, "la situación es un claro ejemplo de abuso de poder".
En estas ultimas horas la presidenta del sindicato de trabajadores del Ballet Folclórico Nacional (Bafonart), Evelyn Hernández Flores, fue trasladada a urgencias debido a una descompensación producida por la huelga de hambre.
La trabajadora cumplió hoy ocho días sin ingerir alimentos, lo que le provocó un diagnóstico de “síndrome neurológico por falta de inanición de alimentos y arritmia cardíaca”.
El sindicato acusa que nadie del Ministerio de Las Culturas se ha presentado para resolver el conflicto, ni generar algún tipo de comunicación que ayude a resolver las demandas de los trabajadores.
Al momento de la redacción de esta nota se nos informa que la señora Evelyn Hernández Flores se encuentra fuera de peligro y debera permanecer en observación permanente por lo menos durante una semana.
La ministra de Cultura, Carolina Arredondo, está enfrentando una grave crisis en su ministerio tras las denuncias de violación a los derechos humanos por parte del Bafona, dirigidas tanto hacia ella como hacia otros altos cargos del ministerio.
La denuncia proviene de la asociación de funcionarios de los artistas del grupo folklórico, quienes argumentan que un grupo selecto de artistas está siendo víctima de “abusos sistematicos“.
"La acción judicial tiene como fundamento detener estos abusos sistemáticos a la dignidad de estos artistas, la discriminación arbitraria y el fuerte ataque sistemático a su integridad psíquica".
La acción no se dirige únicamente contra Arredondo, sino también hacia otros funcionarios del ministerio, incluyendo a la subsecretaria de Culturas, Noela Salas; la jefa de ciudadanía cultural, Marianela Riquelme; el director artístico, Jaime Hernández; y la directora de danza, Yamile Álvarez.
