Nuestros niños en peligro

La ley de garantías de la niñez y el caso de Noruega

Tal como ha pasado y aun sigue ocurriendo en Noruega, la historia se repite en Chile. Cada vez hay mas padres a los cuales se les han quitado a sus hijos por posibles vulneraciones a sus derechos y garantías.

En 1981, Noruega fue el primer país en el mundo en nombrar un Defensor del Niño, un funcionario independiente responsable de proteger los derechos de la infancia y junto con ello una ley de garantías de la niñez.

Tras cuatro décadas de su implementacion los resultados han sido mas que cuestionables pues en este periodo mas de 54.000 niños han sido arrebatados de los brazos de sus padres, en muchos casos de manera cuestionable y sin mayores explicaciones, porque en Noruega basta solo con la denuncia de un anonimo, generalmente alguien relacionado con el area de los servicios sociales para hacer que las autoridades procedan a llevarse a los menores de manera inmediata.

Los casos de padres que sienten que el estado Noruego ha pasado por encima de ellos se repite una y otra vez. Esta el caso emblematico de Ruth y Marius quienes de un dia para otro fueron separados de sus cinco hijos, entre ellos una lactante, y de los cuales solo la bebe volvio con ellos, los otros cuatro nunca mas los volvieron a ver ya que fueron repartidos inmediatamente entre tres familias distintas.

Este caso de una pareja de jóvenes en Noruega alimentó la creciente preocupación sobre las prácticas de protección de la infancia que ejercen ciertos países.

Miles de personas se manifestaron en apoyo a Ruth y Marius en varios países de los cuatro continentes.

El servicio de protección infantil noruego, fue acusado por los manifestantes de "secuestrar" niños, en este y muchos otros casos.

La ley de garantías de la niñez de Noruega es considerado un plan estrella de la Unicef y su principal función es abogar por los derechos de los menores y evitar posibles maltratos físicos y psicológicos contra estos.

Y bajo la misma experiencia del país nórdico es que este organismo de las naciones unidas decidió exportar esta ley siendo Chile, en el año 2018, el segundo país en el mundo en acogerla.

Pero en la actualidad y en Chile, esta ley de garantías de la niñez sumada a programas como el "Crece con orgullo" del ministerio de salud se esta transformando en una verdadera bomba de racimo para familias e infancias.

Ahondemos entonces a lo que se refiere este polémico programa del gobierno de Chile.

Programa "Crece con Orgullo"

Según su pagina, El Programa "Crece con Orgullo" nace a partir de la Ley N° 21.120 que reconoce y da protección al Derecho a la Identidad de Género, específicamente en su artículo 23 indica que “Los niños, niñas o adolescentes cuya identidad de género no coincida con su sexo y nombre registral y sus familias podrán acceder a los programas de acompañamiento profesional . Éstos consistirán en una orientación profesional multidisciplinaria que incluirá acciones de asesoramiento psicológico y biopsicosocial, cuyo objeto será el otorgamiento de herramientas que permitan su desarrollo integral, de acuerdo a su identidad de género”.

Este programa está dirigido a personas trans y de género no conforme de 3 a 17 años de edad y a sus familias, a través de tres componentes: atención género-afirmativa, orientación familiar e inclusión de niños, niñas y adolescentes en el entorno educacional.

Ahora y aquí es cuando comienzan a prenderse las alarmas de la sociedad civil.

La terapia de genero-afirmativa es solo para afianzar la postura del menor con respecto a su identidad de genero y en ningún caso se le permite a nadie, sea al profesional o al entorno cercano al menor, cuestionar ni buscar los motivos del porque esa persona esta pensando o sintiendo distinto y es entonces que uno se hace las primeras preguntas.

Un menor de tres años o un poco mas tiene realmente el discernimiento para decidir sobre su cuerpo o sobre su identidad?

Un niño que apenas sabe pronunciar unas 500 palabras, que esta recién conociendo el mundo y al cual sus padres y familias son su único mundo.

Este programa indica que los padres podrán acceder a los programas de acompañamiento pero una vez que el menor entra en uno de estos programas los padres ya no pueden intervenir mucho mas en lo que es la terapia y si el progenitor o cuidador del menor se opone y desea retirar a su hijo es denunciado inmediatamente como "Padre resistente" y estos tendrán que comparecer tarde o temprano ante un un juez para explicar el porque se oponen a que sus hijos continúen con sus transición de genero afirmativa, ya para ese periodo el menor fue separado de su lado hace rato y enviado a algún centro del Sename 2.0 o casa de acogida.

En el reportaje del programa de TVN emitido hace unas semanas llamado "Nuestros niños trans" la diputada Emilia Schneider indica que " el derecho a la protección del niño esta por sobre otras consideraciones jurídicas ", es decir por sobre el derecho preferente de los padres a educar e intervenir en la protección de sus hijos.

Entonces, segun el planteamiento de la diputada, esta ley podria estar pasando a llevar nuestra constitución actual ya que esta señala en su articulo 19 N/10 el derecho a la educación. Dentro de esta garantía general, asegura de manera expresa a los padres el derecho preferente y el deber de educar a sus hijos, correspondiente al Estado otorgar especial protección a su ejercicio.

Entonces, es posible que una ley y un programa de apoyo trans afirmativo pueda estar por encima de la constitución?

Ahora el programa "Crece con Orgullo" también lleva a los menores a ser asistidos en una terapias hormonales de bloqueadores de pubertad que segun informes internacionales puede tener concecuencias irreversibles.

Que son los bloqueadores de pubertad?

Son hormonas recetadas para menores de edad que podrían manifestar una posible disforia de genero, es decir que no se sienten conformes con el sexo o el genero con el que nacieron.

Lo que hacen estas hormonas de pubertad entonces es bloquear el desarrollo fisico de estos niños y adolescentes, es decir impiden el crecimiento de bello púbico, el desarrollo de las mamas en las mujeres, dejándolos congelados en su natural crecimiento, todo esto durante años en la espera que llegando a una edad aceptable esa persona pueda afirmar definitivamente su genero y desde los 14 años comenzar entonces con otro tratamiento, el de la hormona cruzada, en donde a una mujer se le dan tetosteronas y a un hombre estrogenos para que les empiecen a aparecer las características secundarias del genero escogido.

Uno de los grandes problemas con estos tratamientos hormonales de reafirmacion de genero es justamente la irreversibilidad y segun informes internacionales su uso prolongado en el tiempo no solo puede provocar la atrofia de sus órganos sexuales, también infertilidad, esteoporosis, solo por describir algunas dolencias que acompañaran a la persona por el resto de su vida.

Según informes como el de la doctora Hillary Cass en donde se analizó los servicios de identidad de género para menores de 18 años en el NHS de Inglaterra. Encontró que la medicina de género opera sobre "bases inestables" cuando se trata de evidencia para tratamientos médicos como prescribir hormonas para detener la pubertad o hacer la transición al sexo opuesto.

Todo esto basado en una política trans afirmativa en donde a muchos padres se les ha llevado a aceptar cambios hormonales para sus hijos con la cuasi extorsión de decirles que si no aceptan que su hijo se someta a estos tratamientos entonces lo que va a tener probablemente es un hijo muerto a futuro, con profesionales de la salud que son muchas veces activistas del genero y con casi nulos estudios científicos sobre las disforias de genero.

Ahora el hecho de esta columna no es cuestionar a las personas trans, si ya el joven o adulto con un criterio formado decidió y se siente conforme con su nueva identidad, bien por esa persona, el punto de esta columna es dar un poco mas de luces sobre lo que estas políticas publicas, que en muchos casos son irreversibles, pueden causar a nuestra sociedad y sobretodo a las infancias.

No seria bueno esperar a una edad mas acorde para empezar con estos tratamientos?

Una edad en donde exista al menos la capacidad de discernir del menor si desea someterse a estas terapias y no una edad en donde el pequeño aun no sabe ni siquiera abrocharse solo los zapatos.

Porque se les quita a los padres el derecho a decidir si quieren continuar con estos tratamientos en sus hijos?

Porque no se puede cuestionar una política trans afirmativa?

En fin, como el prologo final de Santiago Pablovic en el programa Informe Especial, aun quedan muchas preguntas por responder.